El
traje era auténtico, o eso decía ella. Yo por mucho que me miraba en el espejo
notaba arrugas por todas partes. La miré a través del cristal detrás de mí.
Ella me miraba con su sonrisa plastificada y las manos enlazadas a la altura
del pecho. Parecía una hiena a punto de saltar sobre su víctima.
La imagen me hizo sonreír, ella lo interpretó como una señal a su favor, y a pesar de que su sonrisa se ensanchó más si cabe, no movió ni un ápice.
El dinero no da la felicidad aunque ayuda, lo que pasa es que a veces las personas se cansan de la vida monótona y de que le hagan la pelota a todas horas, como la dependienta quebla observa con impaciencia.
ResponderEliminarMuy buen relato, un saludo :)
Pues si, todo cansa, hasta el dinero. El problema de tener tanto es que no sabes si la gente que está a tu alrededor es por él o por ti.
EliminarUn besillo.
El dinero ensancha las sonrisas de quienes esperan recibir su parte y provoca las reverencias más hipócritas. O si no, que se lo pregunten a Pretty woman cuando fue de compras.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ayyy me acordé mucho cuando lo escribí. Me has pillado. Es que las referencias al cine nunca están de más.
EliminarUn besillo.
Me vino esa imagen al a la cabeza al leer tu micro. ir de compras con dinero es como cuando Pretty Woman quiso comprar, primero ni la miraron y después le hicieron la pelota. buen micro , mañana saco el mio. Un abrazo
ResponderEliminarPues lo leeré. La verdad es que es divertido tener varios micros para leer las diferentes ideas de una misma frase.
EliminarUn besillo.
Efectivamente la primera imagen que me vino a la cabeza fue esa escena de Pretty Woman, al igual que a Josep.Y si dices que fue tu inspiración, pues conseguiste tu propósito.
ResponderEliminarYa lo dijo uno de nuestros escritores: "Buen caballero es don dinero"
Mi propuesta en breve.
Besos
Pues si, es que don dinero... en fin estamos refraneros, ¿eh?
EliminarEspero tu propuesta.
Un besillo.
Aunque pareciera que tener dinero es siempre una ventaja, surgen situaciones como las que plantea tu estupendo micro: adulaciones gratuitas y falta de sinceridad por parte de quienes te rodean. En este caso va a ser verdad aquello de que "el dinero no da la felicidad"... ¡Muy agudo tu texto, María!
ResponderEliminarUn besillo de martes.
Pues si, no siempre el dinero da la felicidad. A veces te la quita.
EliminarUn besillo.
A mí me recordó al dictador de corea del norte, cuyo pueblo le celebra hasta las flatulencias jaja Claro, él tiene el poder y el dinero absolutos.
ResponderEliminarSaludos y saludes.
Bueno es que hay casos y casos. ese caso es un gran extremo.
EliminarUn besillo.
Hay muchas frases y refranes que ya se han comentado, a mí me viene a la cabeza, "Por dinero ladra el perro". Manejas de una forma perfecta los micros, María, con una simple escena en una tienda nos hacemos ya una idea del mensaje y de otras ideas como la hipocresía, la falsedad, etc.
ResponderEliminarMagnífico, me ha gustado mucho.
¡Un abrazo!
Nunca había oido ese refrán pero me encanta. Me encantan los micros, supongo que por eso nunca he llegado a terminar una novela.
EliminarUn besillo.
Si es que no estamos contentos con nada... que si el dinero no da la felicidad, que si ser pobre es un asco, que si los halagos cansan, que si no me contestan a los comentarios... Uffff, qué vida esta!!
ResponderEliminarUn relato tremendamente expresivo, visual. No solo por el espejo, sino por cómo has retratado las actitudes.
Besos María
Jajajajaja me encanta lo de no contestar a los comentarios. Yo ya no me extreso porque no me contestesn. Yo lo hago, lo que hagan los demás...
EliminarMe alegro de que te haya gustado.
Un besillo.