Se
asomó sola por la escotilla para ver amanecer, o eso dijo abajo. Su cabeza solo
asomaba sus grandes ojos a través de la pequeña ranura. No miraba aquella
esfera brillante anaranjada que estaba saliendo.
Estaba calculando la hora exacta, el momento adecuado, el sitio perfecto para que su marido cayera al agua. Ya estaba harta de sus tonterías de viejo, quería disfrutar de todo aquel dinero ella sola.
Estaba calculando la hora exacta, el momento adecuado, el sitio perfecto para que su marido cayera al agua. Ya estaba harta de sus tonterías de viejo, quería disfrutar de todo aquel dinero ella sola.
Hola Maria.
ResponderEliminarMe sacó una sonrisa un tanto sarcastica.
Esta bueno pues la historia detras la genera el lector. Es el objetivo de los micros.
Un beso.
Muchas gracias, me alegro de haberte sacado una sonrisa, aunque sea sarcástica.
EliminarUn besillo.
Escueto y claro mensaje: Cuando el conjugue estorba que mejor manera de librarse de él que tirándolo por la borda ¿Bastará un simple empujón?
ResponderEliminarBesos
Veremos a ver, a lo mejor no es solo el empujón...
EliminarUn besillo.
Con el mismo inicio qué diferentes micros se leen por aquí. Muy bueno, María. Hay que ser taxativo y directo. Al agua con él.
ResponderEliminarUn beso.
Si, todos nos presentamos al mismo concurso. ASí que lo verás a menudo.
EliminarUn besillo.
Una buena idea para hacer desaparecer un marido. Un abrazo
ResponderEliminarA ver si le sale bien. A veces esas cosas por mucho que se empeñen, no salen.
EliminarUn besillo.
jajaja. Pocas palabras para oscuros deseos. Muy poco poética esa espera pero eminentemente práctica y materialista.
ResponderEliminarUn beso.
Sobre todo materialista. EL que algo quiere algo le cuesta. Así que solo hay que tirarlo por la orda.
EliminarUn besillo.
Mala mala mala la mujer de tu micro, María jaja
ResponderEliminarSaludos y saludes!
Un poco mala si que es. Pero para que haya personas buenas, tiene que haber malas.
EliminarUn besillo.