Te
quiere, mamá. Así rezaba la despedida de aquella carta. Las lágrimas rodaban
por mis mejillas después de haber leído aquellas letras dirigidas a mí.
Letras llenas de dolor, y de amor. Sentada en la mesa de la cocina levanté la vista de refilón, para poder ver a mi madre haciendo la comida mientras tarareaba.
Letras llenas de dolor, y de amor. Sentada en la mesa de la cocina levanté la vista de refilón, para poder ver a mi madre haciendo la comida mientras tarareaba.
¡¡¡Pufff!!! María me has emocionado imaginando la escena.
ResponderEliminarEl poder de tus letras es inconmensurable para pintar de recuerdos con cien palabras.
Besos
Ayyyy me vas a poner colorada, muchas gracias por el piropazo. Me encanta escribir micros, es lo que más me gusta. Se ve que por eso se me da bien.
EliminarUn besillo.
Un adelanto que lo que, tarde o temprano, debe ocurrir. Quizá esa carta llegada precozmente sirva para que, desde ese mismo instante, la hija trate a su madre con un cariño mucho mayor. Cuando se piensa en la pérdida, se agudizan los sentimientos.
ResponderEliminarUn micro muy bello y tierno.
Un beso.
P.D.- Me gusta este sistema que has adoptado de dejar a la vista un pequeño fragmento del texto para picar la curiosidad del lector.
Si, cuando perdemos las cosas es cuando más las valoramos. Es importante valorarlas cuando las tengamos, no sabemos cuando nos van a faltar.
EliminarY lo de dejar solo un trocito, es un truquito que me han enseñado para el blog. Me pareció interesante y lo he colocado.
Un besillo.
Precioso micro donde la sensibilidad está en la piel y en el recuerdo de una madre. Feliz día. Besillos
ResponderEliminarPues si, ¿qué sería de nosotros sin ellas? Las madres son especiales.
EliminarUn besillo.
Hola María, las secuencias de la brevedad ensalzan las realidades más mágicas..
ResponderEliminarPasa buen día, besos robados....
Bonitas palabras para mis letras.
EliminarMuchas gracias.
Un abrazo.
¡¡¡Hola María!!!
ResponderEliminarMe ha encantado, en muy pocas palabras dices tanto...Besos.
Muchas gracias, como siempre digo, los micros me encantan.
EliminarUn besillo.
Ahh! Me emocionaste con tan poquitas palabras. Tu arte no tiene extensión Maria, así como el amor maternal. Besotes.
ResponderEliminarOhhh como me encanta veros esas lagrimitas asomar.
EliminarUn besillo.
Qué maravilla concentrada en tan pocas líneas. Me has puesto los pelos de punta y se me han arrasado los ojos, y te aseguro que no es fácil. Buenísimo.
ResponderEliminarUn beso.
Ohhhh pues no sabes que honor. Es genial poder haceros sentir tanto con mis letras.
EliminarUn besillo.
Como ya te han dicho los compis, cuánto dices con tan pocas palabras, María. Tu micro es conmovedor y tierno a partes iguales :)
ResponderEliminar¡Un beso grande!
Muchas gracias guapa. Me alegro de tenerte por aquí de nuevo.
EliminarUn besillo enorme.
Instantes cotidianos de la vida que cobran (y cobrarán) fuerza y valor y significado una vez que ya no se viven.
ResponderEliminarMás saludos, María!
Muchas gracias Julio David.
EliminarUn besillo.
No lo entendía, pero cuando lo he hecho, uf, me ha parecido demoledor. ¡Fantástico!
ResponderEliminarMe alegro de que estés por aquí de nuevo, María.
Un besito.
Pues me alegro de que al final lo hayas entendido, y que te haya gustado.
EliminarPoraquí estoy de nuevo y seguiré, hasta la próxima, jejeje.
Un besillo.