Sigo
observando mi trocito de cielo, ese que es solo para mí, ese que ha acabado
siendo mi único objeto de valor. Aquí sentada con las piernas encogidas, solo
miro hacia arriba, a través de esa ventanita que vislumbra ese halo de
esperanza color celeste, a veces gris, a veces negro.
Vana ilusión, pero por lo menos le sirve de consuelo. Quizá también le ayude a sobrevivir el tiempo necesario. El cielo siempre nos acompañará, estemos donde estemos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues si, menos mal que tiene el cielo de aliado. Porque se ve que nada más le acompaña.
EliminarUn besillo.
Bonito micro, digno de ganar en el concurso. Eligieron tres que acababan en tragedia. Estaba difícil con tantos que concursan. Un abrazo
ResponderEliminarEs un concurso difícil de ganar, auqnue yo ya no lo espero. Me encanta participar, y encontrarme un nuevo reto cada semana.
EliminarUn besillo.
¡¡Qué relato tan terrible!! Bonito el cielo, pero como empiece a llover... Ya ves que soy poco romántica y muy friolera. No obstante, me ha encantado el micro.
ResponderEliminarUn beso.
Pues como empiece a llover, no quiero ni pensarlo. La verdad es que no creo que este ahí por propia voluntad...
EliminarUn besillo.
Buena propuesta para ese comienzo. Creo que los trocitos de cielo de ese tipo son esperanzadores pero aterradores por lo que significan
ResponderEliminarBesos
Pues si, lo has definido en pocas palabras.
EliminarUn besillo.
Como bien piensa la protagonista de tu micro; el cielo es un halo de esperanza. Lleva días allí, en ese zulo, así que es de imaginar que tiene provisiones para sobrevivir, la pregunta es... ¿para cuánto tiempo?. Si no la encuentran, ni el cielo podrá sanar su mente y cuerpo. Que situación tan dura debe ser. He recordado la película "127 horas", si no la has visto, te la recomiendo, es una maravilla, al igual que tu breve microrrelato.
ResponderEliminar¡Abrazo, Hermana de Letras!
Pues la pondré en mis pendientes, aunque espero que no sea muy claustrofóbica.
EliminarUn besillo Hermano de Letras.
Buen micro, el cielo protector, reconfortante... Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias. la verdad es que por lo menos tiene algo del mundo exterior.
EliminarUn besillo.
Uf, qué angustia... se me van solas las manos trepando por las paredes de ese agujero para salir...
ResponderEliminarMuy buen micro, María! Lástima que he leído que no entró... bueno, pa' la próxima!! ;)
Muchos besitos, preciosa!!!
No me preocupa, siempre hay nuevas oportunidades. Lo importante es no dejar de escribir.
EliminarUn besillo.
Dos cosas: primero, gracias por mostrarme la palabra "zulo". No la conocía. Y ahora no la olvidaré. Segundo, claro, el cielo es siempre sinónimo de libertad. Desde tiempos inmemoriales el ser humano ha buscado sentirse identificado con el cielo (dado su infinitud, su misterio) y hasta ha llegado a creer que habitan dioses entre las nubes y las estrellas.
ResponderEliminarMás saludos!
Me alegro de haberte dado a conocer una nueva palabra, jeje. Si, el cielo tiene una magia indescriptible.
EliminarUn besillo.
Una pincelada de optimismo en una situación realmente penosa. Creo que tu prota dusfrutará hasta el último momento de su encierro, sea cual sea el desenlace. ¡Bien por su actitud!
ResponderEliminarBuen micro, María, me ha gustado mucho.
¡Besillos de domingo!
Muchas gracias. No sé yo si disfrutara.Pero bueno por lo menos es optimista.
EliminarUn besillo.
Un retazo de esperanza, que nunca se acabe. Muy lindo micro.
ResponderEliminarPues si, nunca se sabe lo que pasará.
EliminarMuchas gracias.
Un besillo.
El cielo como esperanza. Muy bueno este microrelato María :)
ResponderEliminarUn beso!
Muchas gracias, el cielo siempre nos trae cosas bonitas.
EliminarUn besillo.
Qué bueno, y me lo había perdido. Me sirve para el sorteo pero sobre todo me alegra haberlo leído, y yo sin enterarme.
ResponderEliminarBesos.
Jijiji siempre quedan rinconces por explorar en todas partes.
EliminarApuntada estas.
Un besillo.